Madero

Llevaba muchos días que no escribía en el blog. No és que no me apeteciese, és que, bueno, igual iba un poco vaga, no sé. Mi pereza va proporcionalmente unida a una especie de Síndrome de Diógenes tal que empiezo a estar exageradamente rodeada de cosas innecesarias que no tiro, pero se acabó: he llamado a mi hermano y se acaba de llevar tres sacos grandes llenos hasta arriba de... bueno, dejémoslo ahí porque la semana ha sido poco menos que catastrófica, menos mal que de bueno, he ido a la dietista como cada mes y he vuelto a bajar peso, otros 10 kilos menos, ya estoy más cerca del peso perfecto. Si sigo así voy a triunfar en las pasarelas de Milán y Nueva York y dejaré mi trabajo actual que ganas no me faltan, eso si me acompañara una cara angelical a este cuerpo de vértigo que me está quedando (cuánto trabajo queda por delanto, Señor!)

Después de bastante tiempo, ayer tuve una cita. No sé si darle las gracias a mi querida amiga Linda Libertad o pegarle un mazazo en la cabeza. Ella alegremente, se conecta a internet y al primer tío que le da el pálpito, le "entra" con ganas de "julepe" y le dice lindezas del tipo "te gustan los tríos¿?"Ella cuenta que tiene una amiga (se refiere a mí, claro)a la que hipotéticamente le encanta este tipo de prácticas y como no, cobro po rello. El precio, está por determinar. Todo esto lo sé por la cita de ayer que me lo contó, un tipo majetón, por teléfono, vamos, educado, cortés, que me puso en antecedentes de lo que la Srta. Libertad va contando.
Por extraño que parezca, no me molesta que diga estas cosas, al contrario, a mí me hace gracia. A estas alturas de mi vida, aquello de "dime con quién andas y te diré quién eres" me pilla un poco lejos, y estoy libre de todo prejuicios y me limito a vivir la vida como me viene pero este hombre se conoce que se quedó un poco patidifuso con los comnetarios de aquí la coleguita.
El caballero, se ofendió. Según él nunca había pagado por "estar"(yacer, se entiende) con una mujer, lo cuál a lo largo de la tarde tuve ocasión de comprobar que mentía como un bellaco, amén de en otros muchos campos como en su edad, que me aseguró tener 54 de los que quedaba a Años Luz, sin duda. Mi padre tiene algunos más y está muchísimo más joven.
El colofón que así como chuleando me suelta que és Policía Nacional. Podría ser verdad... o no... o yo que sé... o a qué me importa! a alguien le importa? no creo, si total, la gente miente po rsistema, hasta me dijo que estaba muy buena, ya hay que ser mentiroso! lo malo és que yo me lo creo y hasta estoy encantada de haberme conocido y lo peor viene al día siguiente que el muy patético no tiene ni la vergüenza torera de llamarte po teléfono para desearte un buén día o decirte lo bién que se lo ha pasado contigo... hombres! estas citas a ciega...
Y también tenemos la ventana abierta en la página esta maravillosa de meetic, puf!
Tras enviar a diestro y siniestro mails, flechazos, guiños y de todo a no sé cuántos seres que pululan ofreciéndose como carnaza para cuánta despavorida desesperada pique, qué me encuentro? que no me contesta nadie... y qué me puedo esperar? Si un madero viejo (al final resultó tener casi 60 años, según él, según yo, aparenta más todavía)es capaz de pasar de mí que soy la reencarnación de Penélope Glamour, voy a esperar que me haga caso uno joven? pués mira, si, lo espero, desde luego que si, porque verdaderamente, como dice alguien que yo me sé... Mañana será otro día!!!